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martes, 29 de diciembre de 2015

Cecilia Valdés (III) ( La Loma del Ángel)





 

La historia de Cecilia, trama argumental de la novela, está tejida alrededor de esta Iglesia del Santo Ángel Custodio, en el histórico barrio de La Habana Vieja,  declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, en 1982.





miércoles, 23 de diciembre de 2015

Navidad

"El evangelio narra que la multitud angélica cantaba:  "Gloria a Dios en las alturas y paz en la tierra a los hombres que él ama". Los ángeles anuncian a los pastores que el nacimiento de Jesús "es" gloria para Dios en las alturas y "es" paz en la tierra para los hombres que él ama. Por tanto, es muy oportuna la costumbre de poner en la cueva estas palabras angélicas como explicación del misterio de la Navidad, que se realizó en el pesebre.

El término "gloria" (doxa) indica el esplendor de Dios que suscita la alabanza, llena de gratitud, de las criaturas. San Pablo diría:  es "el conocimiento de la gloria de Dios que está en la faz de Cristo" (2 Co 4, 6). "Paz" (eirene) sintetiza la plenitud de los dones mesiánicos, es decir, la salvación que, como explica también el Apóstol, se identifica con Cristo mismo:  "Él es nuestra paz" (Ef 2, 14).

Por último, se hace una referencia a los hombres "de buena voluntad". "Buena voluntad" (eudokia), en el lenguaje común, hace pensar en la "buena voluntad" de los hombres, pero aquí se indica, más bien, el "buen querer" de Dios a los hombres, que no tiene límites. Y ese es precisamente el mensaje de la Navidad:  con el nacimiento de Jesús Dios manifestó su amor a todos.

Volvamos a la pregunta:  "¿Por qué Dios se ha hecho hombre?". San  Ireneo escribe. "El Verbo se ha hecho dispensador de la gloria del Padre en beneficio de los hombres... Gloria de Dios es el hombre que vive y su vida consiste en la visión de Dios" (Adv. haer. IV, 20, 5. 7). Así pues, la gloria de Dios se manifiesta en la salvación del hombre, al que —como afirma el evangelista san Juan— tanto amó Dios "que dio a su Hijo único, para que todo el que crea en él no perezca, sino que tenga vida eterna" (Jn 3, 16).

Por consiguiente, el amor es la razón última de la encarnación de Cristo. Es elocuente, al respecto, la reflexión del teólogo Hans Urs von Balthasar:  Dios "no es, en primer lugar, potencia absoluta, sino amor absoluto, cuya soberanía no se manifiesta en tener para sí mismo todo lo que le pertenece, sino en abandonarlo" (Mysterium paschale I, 4). El Dios que contemplamos en el pesebre es Dios-Amor."



sábado, 12 de diciembre de 2015

Cecilia Valdés o La Loma del Ángel, de Cirilo Villaverde. (I)




A finales del pasado año 2015 leí  “Cecilia Valdés o La Loma del Ángel”, famosa novela de costumbres, escrita por
Cirilo Villaverde. Ha sido  una segunda lectura; y en esta ocasión he tenido el privilegio de leer una singular edición  publicada por Editorial Lex, Habana, 1953,   con crítica y comentarios a cargo de Esteban Rodríguez Herrera, profesor de Letras, miembro de la Academia Cubana de La Lengua, correspondiente de la R.A. Española. Un grueso libro de setecientas cincuenta y seis páginas cuya lectura “devoré