El pasado viernes,(mayo 2004) terminé de leerla. Su lectura me resultó pesada; con la salvedad de los últimos capítulos, algo más amenos debido a la introducción de algunos personajes, aunque muy simples, y de sus respectivas historias.
Me llamaron la atención los extensos párrafos, algunos casi tan largos como los propios capítulos que componen la obra, así como las múltiples licencias en cuanto a puntuación y ortografía que el Nobel portugués se ha permitido como, por ejemplo, usar comas en lugar de los punto y seguido o punto y aparte, prescindir del indicativo guión cuando de un diálogo se trata, o la escritura de los nombres propios sin la inicial mayúscula. No sé si ello es una simple originalidad del autor o, por el contrario alguna clave o signo a tener en cuenta en su lectura.
Me llamaron la atención los extensos párrafos, algunos casi tan largos como los propios capítulos que componen la obra, así como las múltiples licencias en cuanto a puntuación y ortografía que el Nobel portugués se ha permitido como, por ejemplo, usar comas en lugar de los punto y seguido o punto y aparte, prescindir del indicativo guión cuando de un diálogo se trata, o la escritura de los nombres propios sin la inicial mayúscula. No sé si ello es una simple originalidad del autor o, por el contrario alguna clave o signo a tener en cuenta en su lectura.
Mientras leía el libro, muchas veces recordé el atentado del 11-M, en Madrid, por los numerosos elementos de cierto parecido allí descritos como, por ejemplo, la cita electoral celebrada aunque las circunstancias aconsejaran en aras de un rigor democrático que fuese pospuesta; la imprecisión de la autoría del atentado terrorista con la colocación de una bomba en un tren( de metro); la plantación de árboles en homenaje a los muertos. Pero, principalmente, por la existencia de un solitario medio que contradice la versión oficial , así como de una emisora de radio, también única, encargada de que se divulgue la versión distinta para movilizar a las gentes. ¡ Cuánto parecido con la realidad! ¡Un Saramago visionario!
Su salida de imprenta, abril 2004,(*) poco después del aciago suceso, justifican, creo, la pura y simple coincidencia con los hechos, tal como advierte la tradicional coletilla añadida a las ficciones verosímiles. ¿Verdad?
-------
(*)En España fue publicado sobre el 19 de abril, pero en Portugal hacía ya un mes de su presentación, y su autor pronosticaba levantaría "un escándalo del diablo" . Que sepa yo, " no lo levantó"
oooOOOooo
13 de junio de 2015: He practicado algunas correcciones a este escrito, al mismo tiempo que he aprovechado para releer el artículo periodístico suscrito por Carmen Sigüenza, en elmundo.es, titulado "Saramago regresa a España con una 'aberración política' bajo el brazo". Su lectura, en estos momentos, día en que se constituirán los nuevos consistorios municipales y autonómicos surgidos no de los resultados de las urnas, sino de los cambalaches y trapicheos antidemocráticos de los politicastros que pululan en las ciénagas corrompidas en las que se ha convertido el mundo político de esta vieja nación, me ha parecido muy oportuna. Así como, también, la reseña suscrita por María luisa de Francesco( Salto, Uruguay) publicada en el recreo.com(libros) :
(**)Saramago murió en 2010.
Otras entradas en relación al mismo libro, autor y cuestión de fondo:
https://silvialeyendo.blogspot.com.es/2008/03/ensayo-sobre-la-lucidez-jose-saramago.html
https://silvialeyendo.blogspot.com.es/2008/03/ensayo-sobre-la-lucidez-jos-saramago-ii.html
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario